Recientemente, los resultados de la investigación que hace el equipo de Terra-i han sido seleccionados para ser publicados en el Informe Anual del CIAT 2012. Previo a su publicación, Neil Palmer, comunicador y fotógrafo oficial de CIAT, ha realizado una nota corta titulada “Desde el cielo, Terra-i le sigue la pista a la deforestación“ (en inglés, “Eye in the sky: Terra-i keeps track of deforestation”) compartido en la sección a continuación. Igualmente, resaltamos que los datos hasta octubre 2012 están en proceso de revisión y estarán próximamente disponibles al público. Igualmente, una herramienta permitirá la descarga de los datos en formatos de tablas y reportes.
Foto por Neil Palmer (CIAT)
El reciente lanzamiento de Terra-i, un sistema de monitoreo de la deforestación en casi tiempo real para América Latina, pone en evidencia zonas de alto riesgo de pérdida forestal.
Con base en información satelital de la NASA, Terra-i puede realizar acercamientos sobre los bosques de la región hasta una resolución de 250 x 250 m. Es lo bastante inteligente como para distinguir entre pérdidas naturales y aquellas causadas por la actividad humana —y también puede monitorear el cambio de los hábitats en las áreas no forestales, tales como sabanas y desiertos. Cualquier persona puede ingresar y observar lo que está pasando —desde cualquier lugar del mundo— y con imágenes actualizadas cada 16 días, es poco lo que se le escapa al sistema Terra-i que todo lo ve.
Desarrollado por el CIAT, The Nature Conservancy (TNC), el King’s College de Londres y la Universidad de Ciencias Aplicadas y Artes de Suiza Occidental, Terra-i busca ayudar a los gobiernos y tomadores de decisiones de América Latina en la formulación de nuevas políticas sobre la protección forestal y de hábitats —y probar la efectividad de las políticas existentes. Siendo la agricultura un factor determinante de la deforestación en la región, Terra-i también puede ayudar a identificar zonas de alta prioridad para la implementación de esquemas REDD+, cuyo objeto es reducir las emisiones de dióxido de carbono producidas por la deforestación y la degradación forestal mediante la integración de las comunidades locales para proteger los bosques.
Si bien Brasil ha tenido su propio sistema de alta tecnología para el monitoreo de la deforestación desde 2008, Terra-i es el primero en cubrir a toda América Latina, desde México hasta Argentina.
Ya ha permitido que científicos se centren en zonas que a menudo se le escapan al radar de deforestación, por ejemplo, el Gran Chaco —un bosque seco de altillanura que se extiende a través de Paraguay, Argentina, Bolivia y partes del sur de Brasil. La segunda zona forestal de más densidad en América Latina después de la Amazonia, es una zona de alta biodiversidad y un museo vivo de plantas prehumanas, pero su difícil situación se ha visto eclipsada por la atención internacional puesta en su vecina, la Amazonia.
Lanzado a mediados de 2012, Terra-i reveló que se han perdido alrededor de 1 millón de hectáreas de bosque en el Gran Chaco entre 2004 y 2010, a causa de la expansión de plantaciones de soya, junto con el desplazamiento de ranchos ganaderos hacia el interior de la región debido a la agricultura industrial en el perímetro.
“Las tasas de deforestación en El Chaco fueron una enorme sorpresa para nosotros”, explica Louis Reymondin, investigador del CIAT y líder del equipo de Terra-i. “Hay tanta atención centrada en la Amazonia —y con toda razón— pero lo que pudimos observar en El Chaco es mucho más grave de lo que se haya visto en cualquier parte de la Amazonia.
“Si los gobiernos van a desarrollar políticas para enfrentar este tipo de amenazas para los bosques, la biodiversidad y los servicios ambientales, deben entender la dinámica de cada región y conocer los factores determinantes de deforestación y cambio en los hábitats. Terra-i puede apoyarlos en esto con precisión”.
Miembros del equipo de Terra-i discuten el sistema de monitoreo de deforestación Terra-i , que puede hacer un acercamiento en los bosques de América Latina para realizar un seguimiento de la deforestación en tiempo casi real.
Foto por Neil Palmer (Ciat)
De acceso abierto y gratuito, Terra-i significa para los países de bajos ingresos en América Latina la oportunidad de monitorear ellos mismos la deforestación. A finales de 2012, el equipo de Terra-i capacitó a técnicos del gobierno boliviano en el uso del sistema.
“Hasta la fecha, el monitoreo vía satelital de la deforestación ha tenido un costo inasequible para muchos países en desarrollo —y muchos de estos países son los más vulnerables”, agregó Reymondin. “Con Terra-i, nos proponemos llevar la tecnología a las manos de la gente que más la necesita”.
En 2013, el equipo de trabajo espera conseguir apoyo para desarrollar el sistema para otras partes del mundo y ayudar a monitorear la deforestación de zonas de alto riesgo en Borneo y la República Democrática del Congo.
Post original en : http://www.ciatnews.cgiar.org/2013/02/14/keeping-an-i-on-deforestation/
El equipo Terra-i junto a CRS El Salvador bajo el proyecto Raíces realizaron un taller virtual a través de la plataforma teams a técnicos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, CARITAS, Universidad El Salvador, CENTA, acerca del Mapeo de las coberturas tierra empleando sensores remotos y herramientas de código abierto como GEE, SEPAL y QGIS- Plugin Semi Automatic Classification.
Near real-time vegetation loss detection in Southwestern Ethiopia: calibration, validation, and implementation of the Terra-i system
The Alliance of Bioversity International and the International Center for Tropical Agriculture (CIAT) (the Alliance) conducted a training for local stakeholders on the use of Terra-i as part of the collaboration with the Netherlands Development Organisation – SNV in the Coffee Agroforestry and Forest Enhancement for REDD+ (CAFÉ-REDD) Project.
Del 8 al 12 de mayo del 2017 el equipo Terra-i, junto al personal de la DGOTA del Ministerio del Ambiente del Perú, bajo el marco del proyecto “Paisajes sostenibles para la Amazonía” realizaron la primera validación de cambios en la cobertura vegetal monitoreados por Terra-i para las detecciones del 2016 y 2017 utilizando tecnología UAV. Se realizaron sobre vuelos con un drone de rotor Phantom 3 advanced y un drone ala fija Ebee en siete corregimientos de Yurimaguas con el objetivo de conocer las dinámicas de cambios de cobertura y uso de suelo en la región y a su vez validar la precisión de las detecciones de pérdida de bosque monitoreadas por Terra-i en Yurimaguas.
El equipo de Terra-i trabajó en la renovación de su sitio web durante este primer semestre, con el fin de brindar a sus usuarios contenidos interactivos y de fácil adaptación a dispositivos móviles. El renovado sitio web se desarrolló usando un administrador de contenidos más actualizado “Magnolia CMS 5.4.4” que les ofrece a los usuarios diferentes categorías de interacción como noticias, datos de cambios en la cobertura vegetal, información, entre otros.
Globalmente más de 1 billón de personas dependen de los bosques para su sustento. Los bosques juegan un papel clave en la regulación del clima, provisión y regulación de servicios ecosistémicos, provisión de agua, almacenamiento de carbono y muchas otras que soportan la biodiversidad. Actualmente la tasa de deforestación global es sustancial por lo que hay la necesidad creciente de información oportuna y espacialmente explícita que permita identificar cambios en la vegetación natural causados por actividades humanas.
La última actualización de Terra-i se ha utilizado con la herramienta de evaluación de los servicios ecosistémicos Co$ting Nature para comprender los impactos de la pérdida reciente de bosques en Colombia sobre la biodiversidad y los servicios ecosistémicos.
Entre el 1 y el 12 de Junio de 2015 el equipo Terra-i, bajo el marco del proyecto “Paisajes Sostenibles para la Amazonía” y en colaboración con el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) y la Universidad Nacional Agraria La Molina (VLIR-UNALM), realizó la segunda validación en campo de los datos del sistema Terra-i. En esta oportunidad la zona de estudio fue el distrito de Yurimaguas, provincia del Alto Amazonas, región Loreto, Perú. Para esta validación en campo tuvimos en cuenta información de centros poblados, vías principales, ríos y los datos de cambios de cobertura detectados para los años 2013, 2014 y 2015, y se definió una muestra de 65 puntos (pixeles Terra-i) (Figura 1).